Un aspecto importante a la hora de medir el rendimiento de un golfista es la consistencia. La consistencia tiene pocos tiros malos y muy pocos hoyos desastrosos. La consistencia puede medirse mediante el seguimiento de los lanzamientos excepcionales, tanto por los lanzamientos de valor muy alto como por los lanzamientos de valor muy bajo. Un lanzamiento horrible es aquel que tiene un valor menor que [-0.8] y un gran golpe tiene un valor mayor que [0.8]. Un tiro típico se considera que tiene un valor entre [-0.8] y [0.8].
La consistencia debe mantenerse en los tiros típicos, evitar los lanzamientos horribles e intentar buscar los grandes lanzamientos. Una medición sencilla de la consistencia es el número de tiros horribles por vuelta. Ejemplos de tiros horrible incluyen los fuera de límites, la mayoría de los golpes que van al agua, hacer un approach a green de 60 yardas y acabar en un bunker, golpear un árbol o fallar un putt de 2 pies. Ejemplos de grandes tiros incluyen embocar desde fuera del green, dejar a 2 pies un tiro desde 90 yardas o dejar a 10 pies un tiro de 210 yardas (Broadie, 2008).
Referencias:
Broadie, M. (2008). Assessing Golfer Performance Using Golfmetrics. En Science and Golf V: Proceedings of the 2008 World Scientific Congress of Golf, eds: D. Crews and R. Lutz, Energy in Motion Inc., Mesa, Arizona, 253-262.
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